Yolanda Vaccaro: entrevista a Ángela Bachiller, primera concejala Down, en El Universal de México
Entrevista en El Universal de México
http://www.eluniversal.com.mx/el-mundo/2013/queremos-y-podemos-hacer-mucho-941559.html
«Queremos y podemos hacer mucho»
Ángela Bachiller, concejala del Ayuntamiento de Valladolid
El pasado 29 de julio, Ángela Covadonga Bachiller Guerra asumió como la primera concejala del Ayuntamiento de Valladolid
Sábado 10 de agosto de 2013
Yolanda Vaccaro / El Comercio | El Universal
MADRID.- Disciplina, esfuerzo y amor. Esos son los ingredientes que han logrado que Ángela Covadonga Bachiller Guerra sea la primera concejala en España con síndrome de Down. A sus 30 años, acaba de asumir en el Ayuntamiento de Valladolid.
En las municipales del 2011 se presentó con el número 18 de la lista del Partido Popular (PP) pero su agrupación sólo obtuvo 17 concejales, por lo que se quedó a las puertas del consistorio.
Ahora llegó su oportunidad, al reemplazar a un concejal acusado de corrupción.
Sus padres, el médico forense Ángel Bachiller y la enfermera Isabel Guerra, trabajaron a fondo desde que Ángela nació para darle la mejor atención posible y para que estudiara en un colegio normalizado, el mismo en el que estudió su hermana, tres años mayor. También han tenido la posibilidad de que Ángela viaje por las principales ciudades europeas, lo que le ha dado una visión del mundo.
Ángela logró un título de Formación Profesional y luego, hace tres años, un puesto como auxiliar administrativa en el área de Bienestar Social del Ayuntamiento de Valladolid. Allí se ganó no sólo el cariño, sino el reconocimiento del personal por su dedicación y esfuerzo.
Sin duda, los padres de Ángela Bachiller tienen gran parte del mérito de esta historia prometedora. La madre ha contado que su hija nació con los músculos muy débiles. Ella y su esposo se empeñaron a fondo con la estimulación precoz y con ejercicio para «activar cuerpo y alma». Son sus padres quienes le inculcaron el esfuerzo. Gracias a su disciplina nunca tuvo problemas de adaptación.
También pudo tomar clases de solfeo, natación, piano, baile, informática e inglés.
Cada verano viajan con ella a alguna playa española y a alguna ciudad europea con historia. Ha conocido algunos de los museos más afamados. Sus pintores favoritos, dice, son Monet y Van Gogh «por los colores y la luz» de sus obras.
Antes de partir hacia las Islas Baleares, de vacaciones, la flamante concejala atendió a El Comercio.
¿Cómo se siente?
Abrumada. Me han pedido entrevistas desde diferentes países. Ahora la gente me reconoce por la calle y me felicita.
¿Cuál será su función en el ayuntamiento?
La que me indique el alcalde. Estoy aquí gracias a él. Él confió en mí y me invitó a la lista del PP. Conoce a mis padres pero luego me ha conocido a mí y sabe que no le fallaré. Asistiré a las reuniones del grupo municipal del PP, a los plenos del ayuntamiento y participaré en las comisiones en las que se me nombre.
¿Cuál cree que ha sido la clave de que ahora sea la primera concejala Down en España?
El estudio. Mis padres se ocuparon de eso siempre. He leído libros como El Quijote. Un libro es el mejor amigo, siempre está cerca y no pide nada a cambio.
¿Ha tenido apoyo de los poderes públicos?
Gracias a Dios mis padres han podido pagar mis estudios, me han podido llevar de viaje a conocer ciudades maravillosas y darme la mejor salud. Si hay gente que necesita recursos, debemos dárselos.
¿Cómo fueron sus años de estudio?
Maravillosos. Me sentí siempre muy integrada, nunca me discriminaron. Pienso que soy un poco privilegiada y ahora trataré de dejar lo mejor posible a las personas Down, ya que podemos hacer muchas cosas útiles.
¿Y cómo define su etapa laboral?
En el trabajo he podido poner en práctica mis estudios de Formación Profesional en Gestión y donde he madurado.
¿Cuál es su meta en el ayuntamiento?
Es una oportunidad única y tengo que trabajar cada día para demostrar que sí podemos.
Y para, si se me permite, poder hacer más por las personas de colectivos diferentes, como el mío, porque necesitamos voz y visibilidad. Queremos y podemos hacer mucho.